«¡Triste época la nuestra! Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio».
Reflexión: Albert Einstein asestó grandes golpes de conocimiento a lo preconcebido en el terreno científico… y también en otros terrenos del conocimiento. Además de sus intrigantes teorías sobre la relatividad, también nos dejó profundas reflexiones sobre la sociedad o la moral. En este aspecto, le preocupaba encarecidamente la problemática que ocasionaban los prejuicios, los sesgos y las ideas preconcebidas en las personas. Esto podría impedir evolucionar hacia nuevos horizontes del conocimiento y obstruir una posible mejora, sacrificando nuevas perspectivas por lo ya conocido. Temía realmente que la mente humana pensara de este modo: “esto es de esta manera y solo puede ser de esta manera porque siempre ha sido de esta manera y no habrá nada más ni mejor que esta manera que todos conocemos ahora”. El conformismo, la intolerancia y los estereotipos, tan presentes en nuestra sociedad, pueden realmente ocasionar una pendiente peligrosa hacia las ciénagas de la ignorancia.
Te toca: Es tu turno para reflexionar. ¿Estás de acuerdo con la afirmación de Einstein? ¿Por qué? ¿Es posible cambiar ideas demasiado arraigadas en un individuo? ¡Dinos tu opinión! Deja tu comentario en:



